Historias desde Japón y punto de encuentro de todos los que tengan algo que decir.

06 abril 2005

Como ya os he dicho, por aquí, incluso con estos otros guiris, para ciertas personas soy bastante exótico. Es llegar al departamento de español y todos han oído hablar de mí. "Si, hay un español que viene de intercambio y tal...". En este departamento conocí al señor Nakajima. Este hombre está jubilado, y como sabe inglés (Estuvo tres años en EEUU para hacer un MBA), en sus ratos libres le da por aprender español. Comimos Chisa, el señor Nakajima y otra chavalina de la que se me ha olvidado el nombre. Ya sabeis, nombres complicados. Después de comer se suponía que debía hacer una prueba de japonés pero enseguida se dieron cuenta del poco sentido que tenía el que lo hiciera. Después de este semi-paripé, fuimos a buscar a Nakajima y allí me presentó a otro paisano. Este era catedrático de la universidad. "Si, por favor, cuando pueda quedemos para Nomikai... Hablaremos en español, etc." Parece que esta palabra es bastante importante en este país. Un buen hombre. La verdad es que aquí, al menos conmigo son super-amables. En definitiva, como tarde la semana que viene estoy invitado por este hombre al Nomikai.