Historias desde Japón y punto de encuentro de todos los que tengan algo que decir.

25 abril 2005

Y oye, que si sabes te tocan más bolas, pues. Por lo visto debes meter las bolitas (que nadie comente esto...) de acero por unos determinados agujerillos y cuando tienes muchas pues las cambias por regalos. Este paisanete, ahí tan tranquilo y en apariencia tan poco habilidoso y míralo, con ocho mil bolitas de las narices. Si es que no deja de sorprenderme este pueblo.